La bandera Antirayos se izó en un cielo negro, aunque sin peligro
La divisa creada para advertir tormentas eléctricas fue estrenada la semana pasada en medio de una fuerte lluvia que cubrió el cielo y alejó a la gente de las playas. Por suerte, se trató de una falsa alarma y el sol volvió a la media hora. MIRÁ LAS FOTOS.
Después de recibir una noticia inquietante, el hombre necesita imperiosamente obtener otra que recomponga su calma frente a lo imprevisto. Eso le sucedió a aquellos que el viernes pasado observaron la bandera Antirayos izarse por primera vez en Villa Gesell. Aunque todos acataron la orden de abandonar la playa y buscar un refugio seguro, el deseo común era el de comprobar que todo se trataba de una falsa alarma. La tragedia del verano pasado permanece fresca en la memoria emotiva y el miedo parece esconderse detrás de las nubes oscuras.
Tras una maravillosa jornada de sol, el cielo comenzó a cubrirse de negro pasadas las 18 horas y casi de inmediato se desató una furiosa lluvia azotada por fuertes vientos. Desesperadamente, los turistas escaparon de las playas y los balnearios guardaron carpas, sombrillas, reposeras y todo material susceptible a los embates meteorológicos. Por fortuna, la amenaza quedó en eso y no se registraron descargas eléctricas. Y, a la media hora, el sol volvió a asomarse como si nada. Aunque ya nadie quedaba: como pocas veces, las playas geselinas lucieron radiantes y vacías en plena temporada alta.
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