Atlético se cargó de esperanzas con una victoria en Otamendi
El Canario venció por la mínima a Juventud Unida de esa localidad y se trajo un triunfo que lo deja bien parado de cara a la revancha del domingo siguiente, en el Carlos Idaho Gesell. El gol lo anotó el ayacuchense Abel Najurieta. Asimismo, en la otra serie, Racing de Balcarce ganó con el mismo resultado, aunque de visitante, frente Ever Ready de Dolores.
noticias@gesell.com.ar | Las crónicas que llegan desde Otamendi, dicen que a Atlético no le sobró nada. Los números, en cambio, revelan otra cosa: el Canario consiguió un gran resultado en el primer compromiso “a todo o nada” que le deparó este Torneo Federal C. Un triunfo de visitante que, si bien no cierra nada, le da un envión inmejorable para definir la serie en el Carlos Idaho Gesell, donde aún no ha sido batido en el año actual.
Después de una primera fase bastante holgada, el Atle se encontraba ante un desafío inédito: superar a un equipo mano a mano, ida y vuelta. En este tipo de cruces importan tanto los goles como los estados de ánimo, y el del Canario tiene que ser el mejor después de haberse traído un resultado que vale más allá de lo que dice el marcador.
Porque Atlético consiguió apenas la mínima diferencia, resultado que deja vivo a Juventud Unida y lo incita a jugarse entero el domingo próximo en Villa Gesell. Pero implicó, por ejemplo, la vuelta al gol de Abel Najurieta después de tres partidos, y encima un momento clave: cuando su equipo necesita del olfato y el poder de fuego de sus delanteros para definir series que por lo general se presentan cerradas. Su alza se suma a la de Iván Blanco, quien sostuvo la artillería canaria cuando el ayacuchense entró en sequía. Atlético tiene entre sus principales activos a su propia dupla de ataque, de la cual emanó el principal argumento para esta victoria: el gol.
Otro aspecto que contribuye al ánimo y revalida la vinculación de Atlético con su ciudad es la progresiva vuelta de Carlos Díaz. Al partido le quedaban pocos minutos y Juventud empujaba hacia el empate. Cualquier entrenador hubiese metido mano para defender la victoria con más jugadores, pero Flavio Simonetti metió un cambio audaz: sacó al ofensivo pero laborioso Lucho Sabalette para apostar al control de balón y la experiencia del Nego. Una buena noticia para el máximo emblema del equipo de temporada baja, que regresó después de una difícil lesión y recibe minutos y confianza en un plantel competitivo y con muchos refuerzos.
Así las cosas, Atlético tiene ahora la oportunidad de cerrar la serie de manera favorable en su propio estadio. Si lo logra, se enfrentará al ganador de la llave entre Racing de Balcarce y Ever Ready de Dolores. El partido de ida lo ganó el primero, en condición de visitante, también por 1-0. El posible rival del Canario se definirá el fin de semana próximo en la ciudad serrana.
Foto: Flor Martín
