Expectativa por el posible hallazgo de un cementerio indio en la región
El mes pasado fueron encontrados en las costas de Mar Chiquita, muy cerca del límite con Villa Gesell, restos óseos y diversas herramientas que podrían pertenecer a los Querandíes. Sería un descubrimiento arqueológico revelador sobre la única comunidad indígena que anduvo por la zona.
Por J.I.P. | Dos maestras de Mar de Plata que se habían ido de paseo por la cercana Mar Chiquita quedaron sorprendidas ante el inesperado hallazgo. Caminando por las playas de aquella ciudad se encontraron, de repente, con un cofre. Tenía una apariencia similar a la de las urnas utilizadas para depositar cenizas. Sabían que muchas personas depositan los restos cremados de sus afectos fallecidos en el mar, por eso no le dieron importancia y retomaron su paso.
Sin embargo, cien metros más adelante advirtieron otro elemento que las obligó a detenerse. Se trataba de una mandíbula humana. Automáticamente decidieron dar aviso a las autoridades.
Por iniciativa de un fiscal, el Equipo Argentino de Antropología Forense se hizo presente. El lugar está ubicado unos 9 kilómetros al norte de la desembocadura de la Laguna de Mar Chiquita. Es decir, a poca distancia del límite entre ese partido y el de Villa Gesell.
El EAAF es muy conocido en todo el mundo. Ellos fueron quienes encontraron el cuerpo del Che Guevara en 1997. Además identificaron distintos huesos sepultados durante la dictadura como NN en cementerios de toda la región, entre ellos el de Villa Gesell.
En esta expedición a Mar Chiquita, los forenses encontraron tres cráneos, una tibia y un peroné, un fémur y huesos chicos. Suponen que pertenecieron a cinco individuos de distintas edades, aunque los restos tienen muchos años de antigüedad, incluso más de los que originalmente se sospechaba.
Las primeras hipótesis eran tenebrosas y abrían la posibilidad a que respondiera a una vieja fosa común, o bien a un hecho delictivo reciente. Sin embargo, hubo una serie de hallazgos que abrieron una tercera línea: dos piedras que se utilizarían para cortar y una pata de animal modificada para que funcionara a modo de cuchillo.
Según el fiscal, podría tratarse de un cementerio indígena. Un dato que llama la atención y que contribuye a abonar esta teoría es que los huesos no fueron encontrados en zona de tierra, sino sobre arena.
Los restos serán sometidos a la prueba del carbono 14 para determinar su antigüedad exacta. ¿Se tratan de huesos pertenecientes a aquellos Querandíes que solían realizar excursiones a las playas de la zona antes de la conquista? Si los resultados coinciden con lo sospechado, arrojarían nuevas evidencias a las pocas que se tienen sobre la única presencia indígena en nuestra región.